Por Purificación Martínez y Marta Gárgoles (Docentes y Facilitadoras del programa de convivencia "En Sus Zapatos").
De forma inesperada se ha originado una nueva situación en nuestra vida cotidiana; tenemos que permanecer en casa. Esto supone convivir con nuestra familia durante mucho tiempo. Los conflictos tarde o temprano aparecerán, son inevitables, porque los pensares, sentires y necesidades son diferentes entre las personas. Sin embargo, también son oportunidades para conocernos mejor.
Los conflictos se solucionan hablando. Estos son los pasos que seguiremos cuando queremos resolver de forma positiva un conflicto, es decir cuando queremos llegar a un acuerdo justo y beneficioso para ambas partes.